PERDER PESO: ¿ES LO QUE REALMENTE NECESITO?

Ya está llegando el buen tiempo, el calorcito, los días son más largos y a todos nos apetece sentirnos bien con nosotros mismos y poder salir a la calle sin temor a que todas esas “imperfecciones” que nosotros nos vemos, salgan a la luz.

Esto hace que empecemos con nuevos propósitos:

· Voy a empezar a comer mejor
· Voy a renovar mi vestuario de primavera- verano
· Voy a empezar a salir a correr o apuntarme al gimnasio.
 

Esto es lo que percibo estos meses en la consulta o cuando hablo con familiares y amigos, pero

¿Es esto lo que realmente necesitamos?

Pues me da mucha pena decir que en la mayoría de casos no lo es, es decir, claro que nos van a venir bien todas esas medidas para cuidarnos y querernos un poco más, pero lo que yo veo es que al final esto no es más que un parche, un remedio que dura unos meses y que después el problema reaparece y a veces incluso más grande, porque al incremento de peso o pérdida de masa muscular se une al sentimiento de culpabilidad y fracaso.

“ES IMPORTANTE ATAJAR EL PROBLEMA DESDE LA RAÍZ, Y ESTO SIGNIFICA PROFUNDIZAR EN LAS EMOCIONES Y EN EL ENTORNO EN EL QUE VIVIMOS”

Esto es lo que trato de explicar y hacer ver a las personas que contactan conmigo o vienen a mi consulta. Es importante atajar el problema desde la raíz, y esto significaprofundizar en las emociones y en el entorno en el que vivimos, para así poder conocernos mejor y entender lo que de verdad estamos necesitando.

Es normal que a veces las personas pensemos que lo que necesitamos es perder peso o mejorar nuestra figura, ya que esta sensación de rechazo hacia uno mismo hace mucho daño, pero la experiencia me ha enseñado que en la mayoría de casos esto solo nos lleva a un círculo vicioso de control-descontrol y a un mayor rechazo hacia nosotros mismos.

Para mí, lo que en realidad necesitamos es aprender a querernos y a respetarnos tal cual somos, entendernos e incluso perdonarnos por no hacer siempre las cosas de manera perfecta. Entender que nosotros no hemos elegido nuestra genética, nuestro nivel de educación alimentaria, nuestra educación alrededor de la mesa o nuestras  experiencias pasadas. Todo esto nos viene así, sin pedirlo, y se trata de tener la suficiente inteligencia emocional para sobrellevarlo todo y para aprender a tomar decisiones desde la calma, el autocontrol, y la conciencia, y no desde el impulso o caer en comer con el piloto automático.

“MUCHAS PERSONAS HAN SUFRIDO MUCHO POR LA CONDENA QUE SUPONEN LAS DIETAS MILAGRO”

Sin embargo, también considero que muchas personas que han sufrido mucho por la condena que suponen las dietas milagro, o por ponerse en manos de una persona no cualificada o no preparada para poner una dieta y hacer un seguimiento en condiciones.

En estos casos es mucho mejor olvidarse de seguir un plan determinado de alimentación, al menos por un tiempo, y comenzar soltando todo el lastre, el miedo, el rechazo y la culpabilidad que supone todo lo relacionado con el peso, la imagen corporal y la alimentación en general.

Por todo ello estoy en este camino de la alimentación consciente y la salud integrativa, para guiar a las personas y ayudarles a encontrar el bienestar y la paz interior que se merecen.